domingo, septiembre 12

Una como quiera, pero y mis machas??

Cuando una cumple los 30 es tiempo de tomar algunas cosas en serio, sí, ya sin mamadas pues, porque quedan más cerca los 40 y ya después de los 40 sólo hay de una: triunfar. (Eso fue mi reflexión cuando me vi envuelta en medio de una presentación de un libro de puras mamadas; el libro digamos que tiene que ver con joterías más bien a-mana-eramientos de una "jóven" lesbiana, que ni lo he leído, pero perfecto me lo imagino).
Y así es que mi teoría de cómo son las chacalas la he llevado a la práctica conscientemente y sabiendo que hay riesgos como el coger en exceso, (con un marca-textos?), o el drogarse en exceso, (con marihuana malamente obtenida, iniciando a un jóven inexperto en el narcomenudeo-afirmación-). De esta manera, mi identidad a partir de mis 30 incluye ser chacala, como un programa piloto (no financiado por ninguna asociación o cosa que no sea mi bolsillo o por la macha que ocupe mis servicios de chacala). Aunque debo resaltar que en mi primer intento he tenido que invertir, porque no es tan fácil o tan explícito que éste es mi trabajo.
La primera práctica de campo, no ha sido tan sencilla, ya que veo resultados pero las reacciones secundarias incluyen agotamiento físico, no mental y no sé cómo evitarlas.
El trabajo de chacala es duro, pero estoy segura de que cuando cumpla mis 40 años podré triunfar ya sea publicando un libro único en américa latina y el caribe y/o actuando mi propia película en una biografía no autorizada y escrita por mi.